¿Bienvenido sea el JOMO?
Stock photo.
En una isla donde el sol no para de brillar ni el grupo de WhatsApp de sonar, decir “no, gracias” se ha convertido en un pequeño acto revolucionario.
Entre stories, textos, eventos, los “¿le llegas o no?”… todo parece urgente. Pero, de momento, llega un susurro más fuerte que el FOMO: quedarte en tu casa sin culpa. Soltar el celular. Ponerte la misma t-shirt oversized por tercera noche consecutiva y simplemente disfrutar no tener que llegar a ningún lado. A eso le llaman JOMO: Joy of Missing Out.
And yes, darling... es lo más hot del momento.
Del FOMO a la calma.
Por años, hemos vivido stuck en todo lo opuesto, en el FOMO (Fear of Missing Out). Hemos estado dándole vueltas a esa cosquillita rara cuando vemos a medio mundo “pasándola brutal” en algún lado o evento en el que nosotros no estamos. Pero la realidad es que a veces simplemente no queremos estar. A veces simplemente el plan es hacerse un messy bun, tomar un tinto de verano y binge watch F.R.I.E.N.D.S. por quinta vez.
Y así nace el JOMO, una joya emocional:
El placer de perderte cosas sin culpas.
El joy de no estar presente donde no quieres.
El maravilloso arte de priorizar lo que realmente importa: tu paz, tu energía, tu ahora.
No es aislamiento. Es intención.
JOMO no es desaparecer del mapa. Es reaparecer en tu propio mapa, moviéndote a tu ritmo. ¿Realmente quiero ir… o solo tengo miedo de no estar? A veces esa pregunta lo dice todo, incluso psicólogos hablan de esto como vivir con autenticidad: dejar en pausa las comparaciones y reconectar desde adentro con lo que realmente te llena.
Y no, no es drama: ¡estar ausente de lo innecesario es estar más presente contigo!
Cómo practicar el JOMO (sin convertirte en la amiga que siempre cancela).
Redes, pero con medida. Trata un mini detox de 30 minutos diarios.
Edita tu calendario como editas tu clóset. Si no te emociona, no vayas… simple as that. (Psst… recientemente lo hice, and it feels GREAT!)
Di “no” como quien marca territorio con un perfume caro: sútil, pero que se queda.
Guarda momentos solo para ti. Créeme amiga, yo también amo hacer contenido, pero no todo tiene que quedar guardado en tu carrete para ser valioso (BONO: más memoria en el celular).
Quick facts para defender tu mood de sofá con matcha ceremonial.
El JOMO baja el estrés y la ansiedad, y mejora tu relación más importante: contigo misma.
La OMS reporta que 1 de cada 4 personas sufre FOMO por redes sociales.
Estar presente (de verdad) mejora tu memoria emocional y salud mental.
El JOMO cultiva relaciones reales, no likes temporales.
Y ahora, una pregunta muy seria para evaluar dónde estamos paradas...
¿Estamos diciendo que sí por ilusión… o por el miedo de volvernos irrelevantes? Porque a veces, decirte que sí a ti es el plan más fabuloso del mes.
And just like that… Escogí mi paz en vez del jangueo, ¡y nunca se sintió tan bien!